Pintar las paredes es una de las formas más fáciles y económicas de cambiar la apariencia de una habitación.
Que el cambio sea positivo o negativo depende de qué tan bien comprendas lo que debes hacer para obtener resultados profesionales. A continuación se muestra una guía sencilla de 10 pasos que explica cómo pintar una pared de la manera correcta.
Protege tu moldura
Después de preparar las paredes para pintar, usar cinta de enmascarar especializada, de acuerdo con las instrucciones de la etiqueta para cubrir la moldura, puede ayudar a pintar líneas limpias y nítidas.
Determina el tipo de pintura que tienes en tus paredes
Dado que el uso del tipo incorrecto de sellador o pintura puede provocar fallas prematuras en la pintura, es muy importante determinar el tipo de pintura que tienes en las paredes.
Frota un área pequeña con alcohol desnaturalizado. Si la pintura pierde brillo o se despega con el trapo, es pintura a base de agua; si no es así, es pintura a base de aceite. ¡Adquiere la que más te convenga y crea algo sensacional en todos tus espacios!
Elige un sellador adecuado
Usa un producto sellador para paneles de yeso y nivela la textura de la superficie. Su aplicación bloqueará las manchas de agua, tinta o crayón.
Para productos de madera, como tableros de fibra de densidad media, usa un sellador a base de aceite para evitar la hinchazón.
También puedes encontrar selladores que te permitan cambiar de pintura a base de aceite a pintura de látex, o viceversa, siempre que la superficie haya sido preparada adecuadamente.
Aplica el sellador
Comienza por verter el sellador en una bandeja de pintura o en un balde de cinco galones con una rejilla de rodillo, luego sumerge el rodillo en el sellador, eliminando el exceso para evitar goteos.
Coloca el rodillo a la mitad de la pared y ruede hacia arriba, cerca del techo, y hacia abajo, hacia el piso, superponiendo ligeramente cada pasada.
Asegúrate de sellar también el techo y todas las esquinas correctamente con una brocha. Deje que el sellador se seque por completo antes de pintar.
Pinta el techo
Sumerge el rodillo en la bandeja de pintura y retira el exceso de pintura. Comienza en una esquina y continúa en diagonal a través del techo en un patrón de “W”, superponiendo cada trazo.
No olvides las esquinas de tu habitación
Con una brocha de 2 a 3 pulgadas, pinta cada esquina de la pared, pintando a lo largo de la esquina y luego hacia afuera unas cuantas pulgadas. Para suavizar los brochazos, pasa la brocha suavemente sobre los brochazos anteriores. Pinta el resto de la pared de inmediato para suavizar los trazos restantes.
Pinta las paredes a lo largo de la moldura
Sumerge una brocha de 2 a 3 pulgadas en la pintura y pásala por la moldura con cinta y a lo largo de la línea del techo. Trabájalo a lo largo de la línea de la cinta o el techo hacia afuera a unas tres pulgadas de la línea de la cinta o el techo.
Aplica la pintura
¿Todavía te preguntas cómo pintar una pared de la manera correcta? Usando un rodillo de 12 pulgadas, aplica la pintura en el mismo patrón en forma de “W”, trazos superpuestos y esquinas y bordes cortados.
Para una apariencia uniforme, asegúrate de que no haya puntos perdidos. Deja que la pintura se seque correctamente y aplica una segunda capa si es necesario.
Retira la cinta
Deja que la pintura se seque durante al menos 30 minutos. Retira la cinta, despegándola lenta y uniformemente para evitar daños en la pintura.
Termina de pintar la moldura
Después de quitar la cinta, una cosa más que debes hacer es pintar la moldura. Comienza lo más cerca posible de la pared y avanza a lo largo de la moldura de arriba a abajo.
Usa una brocha angosta en ángulo para pintar las áreas más delgadas de la moldura y una brocha ancha de borde recto para las áreas más amplias.
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