Comprueba la extensión del óxido. Si sólo se trata de óxido superficial que se desprende al tocarlo suavemente, la pintura se mantendrá mejor. Pero si el óxido es más profundo, es posible que tengas que considerar su sustitución. Si la zona oxidada se puede doblar o moldear, está demasiado deteriorada como para pensar en pintarla. …
