Un dormitorio debe ser una escapada personal, un santuario, que exprese sus colores, sentimientos y colecciones favoritos. Por ello, debes aprender las principales reglas para decorar tu dormitorio.
Elije un colores sutiles
En lugar de colores primarios llamativos, elije tonos monocromáticos y una combinación de colores relajantes . Recuerda la teoría del color: los tonos suaves de azul, lavanda o verde se consideran tranquilos y serenos. Los ricos tonos en tonos joya ayudan a crear un ambiente acogedor y confortable.
Usa versiones atenuadas de tus colores favoritos en el dormitorio. Eso podría significar elegir malva en lugar de berenjena o calabaza en lugar de mandarina.
No pases por alto el techo
El techo es la quinta pared de una habitación. Por ello, puedes agregar un patrón sutil o un color suave. Por ejemplo, puedes pintar el techo con una versión ligeramente más clara del color de la pared. Esto ayudará a bajar visualmente el techo y le dará al espacio una sensación de comodidad e intimidad.
Otras soluciones serían estarcir o empapelar el techo, agregar elementos arquitectónicos en forma de vigas o molduras o utilizar un tratamiento de pintura decorativa. Para obtener el máximo lujo, techos de dormitorio con hojas de plata, una cama con dosel o una tienda de campaña con un vestidor que cuelga del techo puede envolverlo en sensualidad y calidez mientras agrega textura, diseño y color al techo.
Acomoda con inteligencia
Un dormitorio debe verse acogedor y simple, sofisticado y elegante, independientemente del estilo de decoración que elija. Para facilitar el movimiento, deje un mínimo de tres pies entre la cama y las paredes laterales o muebles grandes y al menos dos pies entre la cama y los muebles bajos, como mesas y tocadores.
Si tienes que caminar alrededor de la cama para ir del armario al baño, piensa en cómo puedes mover la cama.
Elije los muebles del tamaño adecuado
Cuando estés listo para comprar muebles de dormitorio, comienza con un plano de planta y un dibujo medido del espacio. Los muebles deben adaptarse a la habitación donde vives y esto es particularmente cierto para los muebles de dormitorio.
No elijas una cama grande y pesada y una cómoda para un dormitorio pequeño. Si el techo es alto, una cabecera alta ayudará a reducirlo visiblemente a su tamaño.
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